En muchas ocasiones un fondo de color negro puede quedarse apagado, sobretodo si imprimimos sobre papeles no satinados, en esos casos se refuerza el negro con otros colores.
Bien podría ponerse 40% de cyan más 100% de negro, o bien 30% de cyan, magenta y amarillo y 100% de negro. Es muy importante tener control de este color y no aplicarlo sobre una tipografía fina, ya que puede producir un efecto de descasamiento.
En otras ocasiones lo podemos utilizar para crear una sutil diferencia entre un fondo negro y un titular, como podemos ver en el ejemplo.